Actividad Bloque 1
Comunicación
oral en gran grupo.
La mente utiliza el lenguaje constantemente para
construir nuestra idea del mundo. Además de ser una herramienta de
comunicación, las palabras nos permiten pensar, organizar nuestras ideas y
dirigir nuestras acciones. Asimismo, según Bodrova y Leong (2004), “el lenguaje
puede utilizarse con el fin de crear estrategias para dominar muchas funciones
mentales tales como la atención, la memoria, los sentimientos y la solución de
problemas.”
El proceso de adquisición y desarrollo del
lenguaje se produce de manera innata desde pequeños y continua hasta que somos
mayores. Esto conlleva una serie de aprendizajes para que sea afectivo, por lo
que es necesario que desde la escuela se trabaje y se favorezca ese desarrollo. Sin embargo, la realidad no es esta. Hoy en
día no existen esos momentos de intercambio de ideas, opiniones, experiencias
dentro del aula donde se trabajan las habilidades comunicativas orales. Desde
la escuela debemos de aportarles las herramientas necesarias para poder
desenvolverse en un futuro en cualquier situación comunicativa de la vida
familiar, social y profesional. Es por eso por lo que nosotras, como futuras
maestras, debemos liberar la expresión infantil favoreciendo la integración
verbal de niño en el aula. El primer paso para eso es motivar y desarrollar al
máximo la expresión oral a partir de su propia experiencia.
Para realizar esta primera actividad, hare un
cinefórum. He decidido utilizar la película de La Niñera mágica. En esta película se trata principalmente el tema
de la educación y el comportamiento. Esto es un tema que se trata en todas las
asignaturas escolares además de en casa. La película nos hace reflexionar sobre
el hecho de que nuestro comportamiento no solo nos afecta a nosotros, sino que
también afecta a los demás, a parte de hacernos ver, que, cambiando algunas
cosas de nuestro comportamiento, cambiamos la relación con la sociedad y
podemos llegar a ser mejores personas.
Esta ingeniosa fábula habla de niños mal
educados y del papel de una niñera especial. Los niños Brown, que se han
quedado sin madre, no quieren tener cuidadoras y con sus argucias procuran
echarlas. Posiblemente, los siete hermanos -Simon, Tora, Eric, Lily,
Christianna, Sebastian y la pequeña Aggy-
sean los niños más traviesos que hayan existido nunca.
Los niños están ocupados en asustar a las
niñeras y en hacer diabluras, sin aceptar reglas ni condiciones. En medio de
este lío aparece McPhee, una persona de aspecto curioso y con poderes mágicos.
Los niños están convencidos que ella tampoco será un problema y que la podrán
echar, pero al hacerse cargo de la situación, McPhee les hace darse cuenta que
su mal comportamiento tiene mágicas e inesperadas consecuencias.
Curiosamente, al mismo tiempo que cambia el
comportamiento de los niños también lo hace el feroz aspecto de Nanny McPhee,
planteando así más preguntas sobre la misteriosa niñera.
La película podría definirse como un tipo de
"Mary Poppins", pero con un poco más de acidez, y esto seguramente se
deba al excelente guion de Emma Thompson. A pesar de que es un cuento sencillo,
que se deja ver con facilidad, tiene componentes clásicos: hay un poco de
Cenicienta, de niños espabilados, de padres superados, de tías ricas
insoportables, etc.
Como queremos desarrollar la comunicación oral y
plantear una actividad oral de gran grupo, me parece apropiado hacerlo con una
clase de 5º de Primaria. Me parece que este tema motivador e interesante
para los alumnos de esta edad, ya que están empezando con la rebeldía.
Primero voy a hablar sobre las características evolutivas
de los niños de esta edad:
Cambios afectivos y sociales
Establecen amistades y relaciones
más fuertes y complejas con compañeros o niños de su edad. Las relaciones
familiares comienzan a perder importancia en contraposición de lo que ocurre
con sus amistades. A nivel afectivo, es cada vez más importante tener amigos,
especialmente los de su mismo sexo.
Aumenta la presión social
ejercida por sus compañeros o niños de la misma edad.
Piensan y juzgan con mayor
seguridad, pero aún a veces, ante ciertas situaciones o adultos, se pueden
sentir inseguros.
No les gusta ser regañados en
público ya que quiebra su seguridad e imagen social.
Razonamiento y aprendizaje
Se vuelven más independientes de
la familia.
Comienzan a entender más el punto
de vista de los otros, mejorando su empatía.
Su capacidad de atención se ve
ampliada.
Son capaces de reflexionar sobre
lo que sienten y de expresarlo.
Lenguaje
Los alumnos mejoran su dominio
sobre las habilidades de comprensión y expresión, tanto oral como
escrita.
Utilizan un mayor grado de
complejidad sintáctica, incluyendo la voz pasiva.
Dominan conceptos gradualmente
más abstractos.
Relación con los compañeros
Los amigos tienen un gran
protagonismo y los grupos comenzarán a hacerse mixtos, pues se han
dominado las normas del grupo homogéneo y, además, van apareciendo los
intereses sexuales. El grupo de compañeros es probablemente el sistema que
mayor influencia ejerce sobre los niños en esta edad. Cada vez se hacen más
dependientes de sus compañeros, no sólo para disfrutar de su compañía, sino
también para la autoafirmación y para recibir consejos. Cada vez consideran más
la amistad como una posibilidad de abrirse al otro y esperan que esa intimidad
se corresponda. Exigen más de sus amigos, cambian menos a menudo de amigos y
encuentran mayores dificultades para hacer nuevas amistades, además de verse
más afectados cuando se rompe una amistad. Se van volviendo más exigentes para
buscar amigos y sus grupos se reducen cada vez más. A la edad de 10 años los
niños muchas veces tienen un “mejor” amigo a quien le son bastante leales.
Las normas para
que funcione una conversación de gran grupo se establecen con los alumnos al
comienzo del curso escolar. Es importante ponerlas por escrito y colgarlas en
las paredes del aula. Estas reglas deben indicar cuando uno puede hablar,
propiciar la participación de cada uno y el respeto absoluto de cada idea y
punto de vista, recordar que las intervenciones tienen que estar relacionadas
con el tema y la idea que se está desarrollando.
La actividad se realizará en clase, con una
disposición de los alumnos y del moderador en círculo para que cada uno pueda
ver al compañero que se expresa y para que parezca una verdadera mesa redonda.
De esta manera, los niños aprenden los valores democráticos en una situación
concreta.
Las normas podrían ser las siguientes:
-
Evitar interrumpir.
-
Escuchar al que habla.
-
Respetar el turno de palabra.
-
Levantar la mano para pedir el turno.
-
No gritar.
-
Terminar nuestra intervención si el moderador lo solicita.
Dejaremos claro desde el principio que el
maestro apenas intervendrá, que serán ellos los que tengan la responsabilidad
de mantener un orden y deberán realizar el dialogo partiendo de la idea “PIENSO
ANTES DE HABLAR”. Además, deberán saber que, para dar otra opinión, primero se
tendrá que opinar la opinión del compañero. Por lo que no se podrá pasar a una
idea nueva sin haber debatido la anterior.
Un aspecto importante que hay que tener en
cuenta, es conocer bien a los alumnos. No todos son iguales, unos son más
activos, participativos, otros más tímidos o no se interesan por las
actividades y nunca participan, otros no dejan participar a los demás debido a
su egocentrismo, etc. Ante estas situaciones debemos saber cómo actuar e
intervenir para que todos tengan las mismas oportunidades de participación y
motivar a aquellos que nunca lo hacen para poder observar y valorar las
intervenciones y así extraer conclusiones para saber en qué aspectos destacan o
cuales hay que mejorar.
Ahora sí, procederemos a la conversación sobre la
película, centrándonos en “el
comportamiento”.
Incitaremos a los niños para que hablen sobre el
comportamiento, sobre como se comportan los niños al principio o al final de la
película, sobre como se comporta la niñera, el padre, la tía, etc. Además de esto, hablaremos sobre
el comportamiento fuera de la película; para ello, llevaremos unas preguntas de
andamiaje para iniciar o reavivar el diálogo si fuera necesario. Por ejemplo,
podrían ser preguntas como: ¿Qué es tener un buen comportamiento? ¿Qué
comportamiento nos gusta que tengan nuestros amigos? ¿Nosotros nos portamos
bien siempre?, etc.
En todo momento, el
profesor tiene un papel activo, ya que, como hemos visto, es quien dice las
preguntas y el modo en llevarlas a cabo. Además, no hemos de olvidar que,
aunque esas sean las preguntas previstas, de cada situación, podrá realizar más
preguntas que surjan con el fin de abordar el tema además de, conseguir con
ello el seguir fomentando la participación de todos los alumnos de la mejor
manera posible. Por consiguiente, con el niño
tímido, tendrá que intentar la participación fomentando un clima que le
aporte seguridad y confianza, pues, eso le ayudará a hablar. Hemos de tener en
cuenta que, quizás primeramente hable bajo, pero no hay que forzarle a que
hable alto, pues son, ante todo, son pasos que va dando. Respecto al niño que no respeta
las normas de comunicación, él debe ser interrogado por el moderador solamente
cuando sigue las normas de intervención. Si habla cuando no ha respetado las
normas, no va a poder aprender de sus errores.
Por último, realizaremos una evaluación final.
La evaluación de actividad oral de gran grupo es
laboriosa porque no hay documentos escritos y los alumnos defienden sus propias
ideas. De hecho, es fundamental que el profesor respeta también el punto de
vista de los alumnos a la hora de evaluarlos. Por esto, entregaría una rubrica
de autoevaluación a cada alumno y otra la rellenaría yo.
Esta sería la rúbrica
de evaluación:
·
Labajo, I. (2018). Didáctica de
la Lengua Española [Teoría de curso].
·
Labajo, I. (2018). Organización y
actividades de didáctica de la lengua [Guía de trabajo].
·
Álvarez Álvarez, C. (2010). El
diálogo en el aula para la educación de la ciudadanía. Investigación en la escuela 2010, 71, 51-62. Recuperado de http://investigacionenlaescuela.es/articulos/71/R71_5.pdf
·
Benítez, J. R. J. (2010).
EVALUACIÓN DE LA COMPETENCIA COMUNICATIVA. INTERVENCIÓN DE LA INSPECCIÓN.
·
Bodrova, E., y Leong, D. (2004).
Herramientas de la mente: el aprendizaje en la infancia desde la perspectiva de
Vygotsky.
La rúbrica de evaluación no se te ha subido...
ResponderEliminarPara que realmente sea una actividad de diálogo en gran grupo y no una simple sucesión de argumentaciones individuales sobre los temas extraídos de la lluvia de ideas, debes asegurarte de que cada respuesta que se dé, sea comentada, debatida, completada... entre todo el grupo hasta que se agote, antes de pasar a una idea nueva. Lo más importante es que no sea: yo pienso que sí por esto, yo pienso que no por aquello... sino que se escuchen y se respondan unos a otros. Deja claro en tu actividad cómo vas a hacerlo porque puede parecer una pequeñez, pero es lo que diferencia un tipo de acto comunicativo de otro.